lunes, 24 de septiembre de 2007

Nuestros derechos esenciales


Hoy solo quiero compartir con ustedes algo que leí en el libro de La danza de la realidad, (Alejandro Jorodowsky) me puso a pensar muchísimo y por eso lo comparto con todos ustedes.

-Tu que pareces saberlo todo, dime que es lo que puedo pretender en esta vida, que es lo que se me debe, cuales son mis derechos esenciales?...

_Antes que nada, deberías tener el derecho a ser engendrado por un padre y una madre que se amen, durante un acto sexual coronado por un mutuo orgasmo, para que tu alma y tu carne obtengan como raíz el placer. Deberías tener el derecho a no ser un accidente ni una carga, sino un individuo esperado y deseado con toda la fuerza del amor, como un fruto que ha de otorgar sentido a la pareja, convirtiéndola en familia. Deberías tener el derecho de nacer con el sexo que la naturaleza te ha dado (es un abuso decir "esperábamos un hombre y fuiste mujer" o viceversa) Deberías tener el derecho a ser tomado en cuenta desde el primer mes de tu gestación. En todo momento la embarazada debería aceptar que es dos organismos en vías de separación y no uno solo que se expande. De los accidentes que ocurran en el parto nadie te puede acusar. Lo que te sucede dentro de la matriz nunca es culpa tuya: por rencor a la vida, la madre no quiere parir y a través de su inconsciente, te enrolla en su cordón umbilical alrededor del cuello y te expulsa, incompleto antes de tiempo> Por que no se te quiere entregar al mundo, ya que te haz convertido en un tentáculo de poder, se te retiene por mas de nueve meses, secándose el liquido amniótico y tu piel siendo quemada; se te hace girar hasta que tus pies y no tu cabeza comienzan el deslizamiento hacia la vulva, así van al nicho los muertos, con los pies para adelante; se te engorda mas de la cuenta para que no puedas pasar por la vagina, siendo sustituido el alumbramiento feliz por una fría cesárea que no esparto sino extirpación de un tumor. Negándose a asumir la creación no colabora con tus esfuerzos y solicita la ayuda de un medico que te oprime el cerebro con su forcéps; porque padece una neurosis de fracaso, te hace nacer semiahogado, azulado obligándote a presentar la muerte emocional de quienes te engendraron.... deberías tener el derecho a una profunda colaboración: la madre debe querer parir tanto como el niño o la niña quieren nacer. El esfuerzo será mutuo y bien equilibrado. Desde que el universo te produce, es tu derecho tener un padre protector que este, durante tu crecimiento, siempre presente. Así como a una planta sedienta se le da agua, cuando te interesas por alguna actividad tienes derecho a que te ofrezcan el mayor numero de posibilidades para que en el sendero que elegiste te desarrolles. No has venido a realizar el plan personal de los adultos que te imponen metas que no son tuyas, la principal felicidad que te otorga la vida es permitirte llegar a ti mismo. Deberías tener el derecho de poseer un espacio donde poder aislarte para poder crear tu mundo imaginario, a ver lo que quieras, sin que tus ojos sean limitados por morales caducas, a oír aquello que desees aunque sean ideas contrarias a las de tu familia.
No has venido a realizar a nadie, sino a ti mismo, no has venido a ocupar el sitio de algún muerto, mereces tener un nombre que no sea el de un familiar desaparecido antes de tu nacimiento: cuando llevas el nombre de un difunto es porque te han injertado un destino que no es el tuyo, usurpándote la esencia. Tienes derecho a no ser comparado con tu hermano o hermana vale mas o vale menos que tu, el amor existe cuando se reconoce la esencial diferencia, deberías ser excluido de toda pelea entre tus familiares, a no ser tomado como testigo de discusiones, o a no ser receptáculo de angustias económicas, a crecer en un ambiente de confianza y seguridad. Deberías tener el derecho de ser educado por un padre y una madre que se rigen por ideas comunes, habiendo ellos en la intimidad aplanado sus contradicciones. Si se divorcian, deberías tener el derecho a que no se te arranque del sitio donde tienes tus amigos, tu escuela, tus profesores predilectos. Deberías tener el derecho a no ser criticado si eliges un camino que no estaba en los planes de tus primogenitores; a amar a quien desees sin necesidad de aprobación; y, cuando te sientas capaz, a abandonar el hogar y partir a vivir tu vida; a sobrepasar a tus padres, vivir mas anos que ellos, realizar lo que ellos no pudieron, ir mas lejos que ellos. En fin, deberías tener el derecho a elegir el momento de tu muerte sin que nadie, en contra de tu voluntad, te mantenga en vida...

1 comentario:

ps¡k!s dijo...

Por azares del destino estoy aquí, leyendo tu blog... y toparme con esta entrada me ha colmado de una grata sensación...

La paradoja vital ¿no? Tener que luchar por la libertad, siendo ésta el principal don que deberíamos tener por el simple hecho de nacer.

Un saludo.